Viernes, 25 de junio. 20 horas. Plaza del Pilar


De nuevo me ha vuelto a pasar y escribo este intento de crónica desmemorizada a casi un mes vista. Lo fui dejando y ha pasado demasiado tiempo.

Era mal día para la Masa Crítica ya que el orgullo patrio estaba en juego con unos chilenos dispuestos a bajar la moral del español. Tal era el panorama que las calles se encontraban casi vacías, solo transitaban aquellas personas que por obligación no podían estar frete a un televisor para animar a "La roja".

Los que estábamos allí no participábamos de ese orgullo patrio aunque sí estábamos dispuestos a luchar por un país mejor, con menos coches, menos polución, más sostenible y menos derrochador. Nos acercábamos a la treintena.

Esta vez decidimos improvisar algo en el recorrido, variándolo. Aunque acabamos frecuentando muchas de las calles habituales, la ciudad es tan pequeña que no da para mucha variación. Casi sin coches, el recorrido transcurrió de forma placentera. Tan solo un impaciente motorista con su impertinente claxon rompía esta tranquilidad.

Finalizamos sin más sobre las nueve y cada uno se fue para su casa. Según dicen el orgullo patrio ha quedado intacto, dicen que somos los mejores. Lamentablemente no en todo.