Viernes, 25 de mayo. 20 horas. Plaza del Pilar.

De nuevo nos encontrábamos a las ocho de la tarde en la Plaza del Pilar, en el Banesto. Un fresquito día 25.

Y nos asaltaba la duda, ¿seríamos más? El frío, la lluvia, los exámenes, la Batalla de Alarcos (prueba para la que algunos amigos están entrenando), en fin las ocupaciones varias... Manuel nos obsequió con su habitual poema.

Vino la prensa a hacer fotos, estábamos pocos, muy pocos.
Salimos 15 con dirección al Pasaje de Gutiérrez Ortega; éramos pocos pero se nos veía mucho ya que todos llevábamos banderín. Reivindicamos, por eso de aprovechar la jornada electoral, que aún no era jornada de reflexión. Esperando que de una vez por todas los políticos nos hagan algo de caso.

Como ya viene siendo habitual la policía nacional y los secretas estaban por el Pilar, por eso de protegernos, o por la oficina de la candidata, que cuando volvimos aún estaban por allí.
Fuimos rápidos, compactos en la mayoría de las veces.

Se echó de menos a la asiduos, a los del Séptimo Piñón, que son valientes para ir a Fuencaliente, pero luego se rajan por un paseíto. Bueno, también comprendemos que las ocupaciones varias son importantes.

Tampoco bajaron nuestros niños y por lo tanto tampoco sus progenitores, ¡de nuevo la lluvia! ... suponemos.

Sin problemas, esperando que en junio seamos más los que nos tomemos el botellín.

Hasta la próxima. Salud y bicicleta.

Viernes, 27 de abril. 20 horas. Plaza del Pilar.

Un nuevo fin de mes y allí estábamos. No éramos muchos, unos 25, que fuimos llegando escalonadamente. Las últimas MC hemos visto disminuir la concurrencia, si bien es cierto que han coincidido con el inicio de periodos vacacionales y puentes, esta vez no había ninguna incorporación nueva.


La policía secreta se interesó por nuestro paseo reivindicativo, haciendo preguntas sobre horarios y recorridos, quién era el responsible, etc. Ya sabéis que en la MC no hay líder, solo un grupo de ciclistas que coinciden simultáneamente en un punto. El caso es que se respondió más o menos y no dijeron nada más.


Sobre las ocho y veinte salimos para hacer el recorrido habitual. Como en otras ocasiones los transeúntes mostraban su estupefacción al ver tantas bicis avanzando juntas. Quizá falte algo que nos identifique a nuestro paso, banderolas o algo así, pero que no parezca una manifestacion puesto que no lo es.


Todo transcurrió con normalidad si se exceptúa un incidente con un repartidor de hamburguesas, que se metió por medio, con muchas prisas, como si tuviera derecho de paso, siendo amonestado por uno de los ciclistas, que discutió algo. Se puede comprender que el chico tuviera prisa porque estaba trabajando, pero eso no es excusa para avasallar al resto de los usuarios de la vía que tienen el mismo derecho a circular que cualquiera.


Habría que hacer notar que debemos transitar durante la MC con la mayor cohesión posible para evitar que los automóviles rompan el grupo y se provoquen situaciones de peligro, como así ocurrió en varias ocasiones. Sería bueno recordar unas mínimas normas para mantener este sentido de cuerpo que debe caracterizar a las MC.


A las nueve y diez ya estábamos en el Pilar. Los secretas aún andaban por allí, y descansaron después de vernos llegar. Parece que el recorrido supo a poco.


Como conclusión decir que aunque después de un año saliendo todos los meses se ha va consiguiendo difundir nuestra idea todavía queda mucho por hacer y sería deseable que cada mes fueramos el mayor número de bicicletas posible haciéndo el esfuerzo de concurrir a la cita siempre que sea posible.



Salud y hasta la próxima.